En una acción que no tiene precedentes en la historia de Internet el gobierno egipcio ha decidido cortar prácticamente todo el tráfico de Internet del país. El apagón digital también afecta al servicio de telefonía celular en muchas áreas y se trata de una acción que por lo global y generalizada no tiene precedentes hasta ahora.
Como muchas otras revueltas populares en países con fuertes medidas que afectan la libertad de expresión, las protestas han resonado fundamentalmente a través de Facebook, Twitter y redes sociales a través de las cuales los jóvenes suben videos, fotografías y se organizan.
El blog de Renesys, una consultora sobre Internet para empresas, muestra un particular gráfico donde se ve que no hubo un apagón centralizado sino que los proveedores han ido comunicándose con los prestadores locales poco a poco hasta frenar toda comunicación.
En GigaOm hay una intersante reconstrucción del proceso del gobierno egipcio para desconectar al país de Internet, salvo algunos servicios básicos como la bolsa de valores.
Si la libertad de expresión es un derecho humano básico, la posibilidad de materializarse en muchos países depende de un libre acceso a Internet. Aunque la tasa de penetración apenas supere el 21%.